Ponemos bolas en el árbol de Navidad principalmente porque su origen está, en la tradición de decorar los árboles con manzanas, que simbolizaban tanto el pecado original como los frutos del paraíso. Con el tiempo, y tras una sequía que afectó la disponibilidad de manzanas, se reemplazaron por esferas de vidrio que representaban las manzanas originales, el pecado original, y más tarde, los dones que Dios otorga y otros valores como la unidad y la prosperidad.
Origen religioso y simbólico
- Manzanas: Originalmente, los árboles se decoraban con manzanas que representaban el pecado original de Adán y Eva en el Jardín del Edén.
- Dones de Dios: Las esferas reemplazaron a las manzanas y simbolizan los dones que Dios ha dado a la humanidad.
- Eternidad: Su forma redonda, sin principio ni fin, representa la eternidad de la fe y la unión familiar.
Origen práctico
- Una sequía: En 1858, una sequía en el norte de Francia hizo que las manzanas escasearan, lo que llevó a un vidriero a fabricar esferas de vidrio para adornar los árboles como sustituto.
- Peligro de incendio: Las velas utilizadas para iluminar el árbol eran un peligro de incendio, y las esferas de vidrio y las luces eléctricas reemplazaron a las velas de manera más segura.
Otros significados
- Colores: Diferentes colores de esferas tienen significados específicos:
- Rojas: Representan el pecado original, pero también el amor y la generosidad.
- Doradas: Simbolizan la prosperidad, la riqueza y la alabanza.
- Blancas: Representan la pureza, la alegría y la fe.
- Azules: Representan el arrepentimiento y la reconciliación.
- Verdes: Representan la esperanza, la naturaleza y la vida.






Deja un comentario